Para todos los que desean abandonar de forma definitiva el consumo de drogas y recobrar una vida libre de toda adicción a una droga o sustancia psicotrópica, recomendamos dos comunidades que han sabido demostrar sus competencias, eficacia y entrega, en el amor y el respeto del toxicómano.
Centro de curación a través de la abstinencia total: comunidad San Patrignano
Una educación
El tratamiento es esencialmente educativo y de readaptación. La persona no es considerada como un paciente, por tanto no se utilizan los tratamientos farmacológicos de la dependencia.
Programa individual
Se trata de un programa personalizado de recuperación que varía en función de las distintas características y necesidades de cada individuo. Luego viene la etapa terapéutica rígida, no definida en función del tiempo. Sin embargo, teniendo en cuenta los problemas y la necesidad de un cambio radical en la persona, es un programa de recuperación a largo plazo. La duración mínima es de tres años.
La importancia del grupo
Cuando persona que entra en una comunidad, integra uno de los programas impartidos por San Patrignano. Un chico es confiado a otro chico que pasa a ser su mentor, y durante el primer año en la comunidad (tiempo variable de un chico a otro), lo sigue en permanencia en su recorrido. El chico vive en la sala con el tutor y con otros chicos. Cada habitación cuenta con su propio gerente, cada sector tiene uno o varios educadores referentes. Estos son los grupos principales con los cuales la persona vive todos los días en el seno de la comunidad.
Gratuidad
San Patrignano es totalmente gratuita. Para la entrada y la estadía en la comunidad, la gratuidad permite que cada persona se sienta protagonista de su propio camino. Les productos y servicios desarrollados para la autofinanciación representan un 50% de las necesidades de la comunidad. Los fondos restantes provienen de donaciones.
Laicidad
Los principios básicos sobre los cuales se fundamenta la educación de la intervención terapéutica (respeto de la vida, para sí mismo, los demás y el entorno) están universalmente reconocidos por las distintas confesiones religiosas y consagrados en la Constitución italiana.
Centro de curación por abstinencia total: comunidad del Cenáculo
http://www.comunitacenacolo.it
Para los chicos y las chicas tóxicodependientes que deseen ingresar en nuestra comunidad, requerimos algunas “entrevistas preliminares” para que puedan conocer el estilo de vida de la Comunidad, y para verificar los deseos de cambio de la persona. Además, ese tiempo sirve para hacer participar a la familia y para preparar al joven a entrar en la Comunidad.
Luego de algunas entrevistas, el joven es invitado a pasar unas jornadas (desde por la mañana hasta por la noche) en una hermandad para que pueda ver de forma más concreta la vida de la Comunidad, y si lo desea y estamos de acuerdo, será el bienvenido.
El ingreso es gratuito: cada familia, libremente, puede colaborar según sus medios. No recibimos personas con problemas psíquicos (esquizofrenia, trastornos mentales agudos) pues no estamos calificados para brindarles la asistencia médica especializada y constante que necesitan.
¿Eres médico, de profesión liberal... y dispones de una sala de espera?
Ningún padre le prestaría su coche al hijo que no haya aprendido a conducir. De la misma manera, sería inconsciente dejar salir a un hijo adolescente sin haberle enseñado lo que es la droga. Hoy en día, la disponibilidad de las sustancias es tal se puede conseguir droga en todos los sitios frecuentados por los jóvenes (institutos, fiestas, cenas de clase, rallyes, clubs deportivos…). Los padres deben formarse objetiva y científicamente para poder educar a sus hijos sobre los peligros de la droga y brindarles argumentos para rechazarlas. No olvidemos que nadie está a salvo de la toxicomanía.
Todo tipo de droga psicotrópica, ya sea legal o ilegal (ansiolíticos, tranquilizantes, benzodiacepinas, neurolépticos) o ilegal (drogas de la calle) conducen al malestar, a la depresión y al suicidio. Más información.
Una persona toxicómana es aquella que toma droga para solucionar los problemas generados por la misma. La persona cree que puede dejar de consumir droga cuando quiere, mientras que es incapaz de hacerlo, a pesar de las consecuencias causadas por su consumo… Si le falta el producto, la persona toxicómana solo piensa en conseguirlo, por más que tenga que cometer actos que no aprueba, la necesidad es tan fuerte que toda referencia a la voluntad, al esfuerzo, al amor, la moral tiende a desaparecer y desaparece. La mentira, la violencia, la agresividad, el sufrimiento moral y físico, la auto-mutilación, el miedo se vuelven elementos cotidianos. Al perder la autoestima por culpa de los actos nefastos que comete, a la persona toxicómana solo queda la soledad y las ganas de suicidarse.
El porro es cannabis, hierba, consumido puro, o hachís mezclado con tabaco. Cuando hablamos de alcohol, nos referimos a un término genérico que cubre una gran diversidad de productos: El vino, la cidra, la cerveza, el porto, el coñac, el whisky, el vodka son alcoholes con una tasa que varia entre 5 y 90 grados. Ocurre lo mismo con el cannabis: Existen más de 100 variedades distintas y la tasa de T.H.C (principio activo) varía entre un 4 y un 35%.