Abstinencia:
Interrupción total del producto sin ningún tipo de sustituto.
Hábito:
Necesidad de aumentar las dosis de una sustancia psicotrópica para obtener los mismos efectos. Acostumbrado, habituado, insensibilizado por el producto, el consumidor deberá tomar una cantidad cada vez mayor y con más frecuencia. A pesar de las terribles consecuencias, cansancio, malas notas, mentiras, robos, solo piensa en la droga, a comprarla y consumirla.
Bong:
Pipa de agua rudimentaria (ejemplo: botella de plástico) que permite concentrase e inhalar el humo de una sustancia, después de haberla humedecido con el contacto del agua o de alcohol. Esta humidificación permite al TCH pasar inmediatamente en la sangre a través de la garganta, la lengua, las vías respiratorias.
El subidón, consecuencia de esta práctica, es violento, alcohol y cannabis provocan un aumento mutuo de sus efectos.
Esta práctica extremadamente peligrosa favorece el cáncer precoz de la lengua, de la tráquea (hemos recibido testimonios relacionados con jóvenes de 18 años).
Es el tiempo que necesita el organismo sano (que nunca ha consumido) para eliminar el 50% de la sustancia absorbida.
Dependencia:
Dificultades para vivir sin el producto.
Casquillo:
Marcador de metal o pipa de terracota para fumar hachís.
Potenciador:
La suma de ciertas drogas provoca un aumento mutuo de sus efectos. El alcohol potencia el efecto de todas las drogas.
Psicotrópico:
Que actúa sobre la mente.
Reactivación:
Reactivación de un producto almacenado en las grasas en caso de estrés o de miedo: cóleras, violencias físicas y verbales, agresiones.
Muchos accidentes de tráfico se explican por ese fenómeno, el consumidor se encuentra a menudo bajo el efecto del producto y no está en plena posesión de sus facultades físicas y mentales.
Privación:
Interrupción del consumo de una droga psicotrópica.
En el mundo entero, los mejores resultados se obtienen gracias a la abstinencia total.
Esnifar:
Absorber droga por la nariz.
Sustitución:
Remplazar un producto por otro. En el caso de la toxicomanía, es administrar una droga psicotrópica legal, fabricada por un laboratorio farmacéutico (antidepresivos, somníferos, neurolépticos, anfetaminas) para remplazar una droga de la calle.
Flashear:
Efectos experimentados por el consumidor de drogas psicotrópicas.
¿Eres médico, de profesión liberal... y dispones de una sala de espera?
Si, el alcohol es una sroga sedativa. Una persona que bebe regularmente una fuerte dosis de alcohol se vuelve alcoholica al cabo de unos años. El alcohol tiene la particularidad de potenciar los efectos de todas las demás drogas. Una persona que toma alcohol junto con una o varias drogas se vuelve rápidamente toxicómana.
Ningún padre le prestaría su coche al hijo que no haya aprendido a conducir. De la misma manera, sería inconsciente dejar salir a un hijo adolescente sin haberle enseñado lo que es la droga. Hoy en día, la disponibilidad de las sustancias es tal se puede conseguir droga en todos los sitios frecuentados por los jóvenes (institutos, fiestas, cenas de clase, rallyes, clubs deportivos…). Los padres deben formarse objetiva y científicamente para poder educar a sus hijos sobre los peligros de la droga y brindarles argumentos para rechazarlas. No olvidemos que nadie está a salvo de la toxicomanía.
La droga no es una enfermedad. Dejar de consumirla es la mejor manera de salirse de la droga. .
Los heroinómanos que han logrado dejarla reconocen que la abstinencia total es la única vía posible. Ellos mismos afirman que es más difícil dejar el Subutex (droga de sustitución) que la heroína…
La mayoría de las drogas permanecen el cuerpo durante años, almacenados en los tejidos grasos.
Durante un esfuerzo o estimulo físico, una caminata, una sesión de deporte, una sensación de miedo, de sorpresa, de excitación, se quema un poco de grasa y pequeñas cantidades de droga son reactivadas en la circulación sanguínea.