"Considero que los padres tienen la capacidad de educar a sus hijos. [...] Cualquier persona es capaz, en el mayor de los casos, de asumir a su hijo. [...] Los padres solicitan la ayuda de psicólogos durante años y pagan muy caro, mientras que de manera general tienen ellos mismos la capacidad de ayudar a sus hijos.
Suelo decirle a los padres: "Lo tienen todo en sus manos, busquen. Pero simplemente, tómense el tiempo de mirar a su hijo."
Guy Gilbert, "Grito de jóvenes"
Cuando se consume simultáneamente alcohol con cannabis, estos dos productos potencian mutualmente sus efectos.
Existe una práctica hoy en día generalizada, que consiste en asociar alcohol, cannabis, y otra droga. Muchos jóvenes hoy en día practican buscan “colocarse” mediante esta práctica corriente.
Los médicos generalistas son los primero testigos de la toxicomanía. Para más información cliquear aquí.
Si, el alcohol es una sroga sedativa. Una persona que bebe regularmente una fuerte dosis de alcohol se vuelve alcoholica al cabo de unos años. El alcohol tiene la particularidad de potenciar los efectos de todas las demás drogas. Una persona que toma alcohol junto con una o varias drogas se vuelve rápidamente toxicómana.
Ningún padre le prestaría su coche al hijo que no haya aprendido a conducir. De la misma manera, sería inconsciente dejar salir a un hijo adolescente sin haberle enseñado lo que es la droga. Hoy en día, la disponibilidad de las sustancias es tal se puede conseguir droga en todos los sitios frecuentados por los jóvenes (institutos, fiestas, cenas de clase, rallyes, clubs deportivos…). Los padres deben formarse objetiva y científicamente para poder educar a sus hijos sobre los peligros de la droga y brindarles argumentos para rechazarlas. No olvidemos que nadie está a salvo de la toxicomanía.