EL COMITÉ DIRECTOR
EL EQUIPO
Pascaline Cabouret
Estomatóloga, siempre ha luchado contra el uso de la droga. Adquirió su experiencia tanto el Samu como en las escuelas o durante sus consultas. Madre de 5 hijos, de edades que van desde los 25 hasta los 15 años, me hablaron de MC d'Welles por primera vez en el 2001, cuando era miembro de la asociación de padres de alumnos.
"Quise conocer la asociación que ella representaba, y participé a una formación. Enseguida le comenté al director del colegio el interés de invitar a la señora d’Welles. He ido varias veces a formarme a Infancia Sin Droga para poder informar correctamente en los institutos de la enseñanza secundaria, y encargarme de otra manera de mis pacientes concernidos, poder hablar del tema con mis hijos y en mi entorno. ¡Porque todo el mundo conoce a alguien que consumo drogas psicotrópicas! He aprendido mucho durante los encuentros en los relevos de Infancia sin Droga, ayudando a la asociación y gracias a los testimonios de los padres”
Claudie Colin
Madre de una hija de 27 años, me sensibilizaron al problema del consumo de cannabis en los jóvenes durante una formación, diez años atrás.
He tenido la suerte de no estar directamente concernida, pero mi hija evoluciona en un mundo que consume con más o menos frecuencia. Me parece importante informar y sobre todo prevenir. Éste es uno de los motivos por los cuales me incorporé a la asociación. Frente al aumento del consumo de cannabis en los jóvenes, este compromiso es muy importante para mí. También formo parte de otra asociación que privilegia la familia y valoriza su papel en nuestra sociedad.
Sophie Pélissié du Rausas
A principios del año 99, asistí a una conferencia de Marie-Christine d'Welles sobre la droga en el marco del Movimiento Mundial de las Madres. En esa época, sólo tenía dos hijos, de 4 y 2 años y medio. ¡Vale decir no estaba para nada concernida por el tema! Cuando oí que la mayoría de los alumnos de la secundaria consumían droga, que iban mal a causa de la droga y que ya no podían hablar del tema con sus padres, sentí que había una urgencia. Le propuse a Marie-Christine d'Welles asociarme con ella para encontrar la mejor manera de ayudar, y nos pareció que la prevención era la solución más adecuada.
Así es cómo se creó Infancia Sin Droga. Diplomada del EM Lyon, quise completar mi formación sobre las drogas cursando un Diploma Universitario de Toxicomanía y Dopaje en la Facultad de Medicina de Angers.
Sophie Roubertie
Madre de tres varones (de entre 6 y 17 años de edad), jurista de formación. Convencida que es indispensable estar bien (in)formada para ser creíble frente a nuestros hijos, seguí en el 2003 una de las formaciones de Infancia Sin Droga. Entonces realicé lo mucho que había evolucionado y hasta qué punto era necesario prevenir a nuestros hijos sobre los peligros de la droga.
Hace diez años, no imaginaba hasta qué punto la droga se encuentra en todos lados y de manera tan accesible. Más que nunca, me importaba hacer circular una información objetiva tanto para los hijos como para los padres.
Marie-Christine d'Welles
Escritora, conferencista. Ha publicado en 1989 su primer libro “Loca, ¿Yo?” (Folle, moi ?) Editorial Stock, y varias novelas, ensayos, documentos, traducidos en varios idiomas. Sus dos últimos libros “Bajo su ala un refugio” (Sous son aile un refuge) y “¿Qué es la droga?” (C'est quoi la drogue?) fueron publicados por la Editorial Jean-Cyrille Godefroy en febrero y septiembre de 2013.
Marie-Christine d'Welles también es Fundadora y Secretaria General de Infancia Sin Droga, madre de 3 hijos y abuela de seis nietos.
Consulte son sitio Internet : www.mariechristinedwelles.fr
Una persona toxicómana es aquella que toma droga para solucionar los problemas generados por la misma. La persona cree que puede dejar de consumir droga cuando quiere, mientras que es incapaz de hacerlo, a pesar de las consecuencias causadas por su consumo… Si le falta el producto, la persona toxicómana solo piensa en conseguirlo, por más que tenga que cometer actos que no aprueba, la necesidad es tan fuerte que toda referencia a la voluntad, al esfuerzo, al amor, la moral tiende a desaparecer y desaparece. La mentira, la violencia, la agresividad, el sufrimiento moral y físico, la auto-mutilación, el miedo se vuelven elementos cotidianos. Al perder la autoestima por culpa de los actos nefastos que comete, a la persona toxicómana solo queda la soledad y las ganas de suicidarse.
La mayoría de las drogas permanecen el cuerpo durante años, almacenados en los tejidos grasos.
Durante un esfuerzo o estimulo físico, una caminata, una sesión de deporte, una sensación de miedo, de sorpresa, de excitación, se quema un poco de grasa y pequeñas cantidades de droga son reactivadas en la circulación sanguínea.
El AIRE SECO O COMPRIMIDO: El oxido de nitrógeno y otros gases bajo presión también tienen efectos alucinógenos. En pocos segundos producen una excitación, aturdimiento, una risa tonta, perdidas del conocimiento y por, falta de oxigeno, lesiones en el sistema nervioso central. Más información
El POPPERS: Les nitritos volátiles tienen efectos similares a los del oxido nitroso. Pueden provocar ataques de pánico, palpitaciones y dolores de cabeza. También son responsables de la muerte por anorexia. Más información
El AGUA ESCARLATA: Los disolventes son derivados del etileno. Son alucinógenos pero su efecto es más bien tranquilizante. Provocan afecciones neurológicas (sordera, temblores…) e intelectuales (demencia).
Los médicos generalistas son los primero testigos de la toxicomanía. Para más información cliquear aquí.