Cuando tenemos que pasar por el quirófano, es esencial para evitar que el anestesista de drogas legales e ilegales que consumimos. Cualquier anestesia se logra a través de las drogas legales psicotrópicas. Si el paciente es un cannabis o cualquier otra droga, el anestesista debe tenerse en cuenta para evitar la potenciación de estos fármacos lo que provoca un cambio que puede ser fatal. La anestesia es siempre complicado y precisa, anestesiólogos hacen largos estudios para controlar estos venenos y nos evitan muchos riesgos.
Necesitamos a nuestros jóvenes porque se dan cuenta que no siempre es posible hacer el registro de anestesia (por ejemplo, accidente de tráfico, peritonitis, desmayo, o estado de coma, de emergencia ..)
Los médicos generalistas son los primero testigos de la toxicomanía. Para más información cliquear aquí.
Todo tipo de droga psicotrópica, ya sea legal o ilegal (ansiolíticos, tranquilizantes, benzodiacepinas, neurolépticos) o ilegal (drogas de la calle) conducen al malestar, a la depresión y al suicidio. Más información.
Cuando se consume simultáneamente alcohol con cannabis, estos dos productos potencian mutualmente sus efectos.
Existe una práctica hoy en día generalizada, que consiste en asociar alcohol, cannabis, y otra droga. Muchos jóvenes hoy en día practican buscan “colocarse” mediante esta práctica corriente.
En 1968, contenía entre 0,6 y 6% de THC (Tetrahidrocannabinol, principal principio activo). Desde hace varios años, a causa de manipulaciones genéticas, híbridos y cultivos cubiertos, puede contener hasta un 35% de THC. Actualmente, el cannabis consumido por los adolescentes ya no tiene nada que ver con el que los padres han conocido.
Una persona toxicómana es aquella que toma droga para solucionar los problemas generados por la misma. La persona cree que puede dejar de consumir droga cuando quiere, mientras que es incapaz de hacerlo, a pesar de las consecuencias causadas por su consumo… Si le falta el producto, la persona toxicómana solo piensa en conseguirlo, por más que tenga que cometer actos que no aprueba, la necesidad es tan fuerte que toda referencia a la voluntad, al esfuerzo, al amor, la moral tiende a desaparecer y desaparece. La mentira, la violencia, la agresividad, el sufrimiento moral y físico, la auto-mutilación, el miedo se vuelven elementos cotidianos. Al perder la autoestima por culpa de los actos nefastos que comete, a la persona toxicómana solo queda la soledad y las ganas de suicidarse.